Evito ciertos trenes. Ciertos andenes.
Evito ciertos trenes, porque prefiero levantarme una hora antes, o llegar una hora más tarde a casa, que tener que volverme a cruzar contigo.
Y es ahí, en los andenes en los que espero por no tener que volver en el mismo tren que tú, en las estaciones en las que hago tiempo cuando llego demasiado pronto. Es ahí, donde irónicamente, te encuentro más a menudo. Te encuentro en las canciones que intentan amenizarme la espera. Te encuentro en las palabras que escribo mientras pasan los minutos hasta el siguiente tren que pueda acercarme a casa.
Escribo en los andenes, en los trenes, en las estaciones. Y por tanto, vaya a la hora que vaya, en la estación que sea, siempre te encuentro allí, de una manera u otra.
Porque es imposible huir de ti, es imposible huir de ti, si te sigo llevando conmigo.
He encontrado esto por casualidad y me ha hecho recordar lo que me gusta leerte.
ResponderEliminarOjalá poder leernos toda la vida.
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