sábado, 24 de enero de 2015

Lo mejor del 2014

Aunque ya hace casi un mes que empezamos el 2015, todavía hay gente que me pregunta por mi mejor momento del año 2014. Cuando te hacen una pregunta como esta no es fácil contestarla, ya que tienes para elegir algo de entre 365 días, 8760 horas, 525600 minutos, 31536000 segundos... Este año ha sido uno de los más movidos de mi vida, estaría en la lista de los peores pero también en los primeros puestos de la lista de los mejores. Ha habido momentos duros, de llantos y lágrimas. Muchas personas han salido de mi vida. Hubo personas, una en realidad, que entro en mi vida muy rápido y así de rápido se fue, dejándome destrozada. Pero no todo han sido cosas malas, personas que ya estaban ahí, siguen conmigo otro año más. Y otras muchas nuevas han entrado. Algunas ya estaban ahí, como estrellas tapadas por una nube, que puede que no las veas, pero están. Y luego están las completamente nuevas, una de las mejores cosas de este año sin duda. Recuerdo perfectamente el día que mi padre me despertó y me dijo ''vístete, desayuna y arréglate. Coge un bikini''. Yo la verdad ni siquiera sabía donde íbamos, y cuando llegamos y llego el momento de presentarme gente de ''mi edad'', me presentaron a tres chicos que en ese momento me parecían demasiado altos. Me sacaban unos dos años y tres cabezas. Y luego llegaron las chicas, dos un año más mayor y una un año más pequeñas. Me acuerdo que me apoyé en el coche y no hablaba con nadie, ya que por un lado se conocían las chicas y por otro los chicos. Hasta que me dijeron que fuera con ellos. Consiguieron que la persona más tímida del planeta, se sintiera completamente segura y a gusto. Fue uno de los mejores días del verano, lleno de risas, aguadillas y empujones por la espalda. Quedamos más veces, muchas más. Fuimos a piscinas, a pueblos, a hacer caminatas y a subir montañas; de día y de noche, pero siempre juntos. Con estar juntos lo demás daba igual. Y llegó el día en el que mi padre llegó a casa y me dijo que nos íbamos todos juntos de vacaciones menos dos de las chicas que no podían venir. Me pilló tan de sorpresa que no sabía ni que decir. Ahora si se que decir. Una de las mejores vacaciones de mi vida. Asturias nos echa de menos, por esta y muchas más veces.

domingo, 11 de enero de 2015

Hoy soy más fuerte

Hoy, mientras caminaba, tenía una extraña sensación que me decía que me iba a encontrar contigo. Aunque siendo sincera, todas las tardes que volvía caminando tenía la misma sensación. Pero hoy era distinto. Me daba igual encontrarme contigo, sentía que no me afectaría. Y mi intuición no se equivocaba. Al girar hacia la calle principal, ahí estabas tu, apoyando en uno de los blancos muros del hospital, algo despistado. Normalmente nos habríamos mantenido la mirada sin decir nada pero esta vez no fue así. Cuando te diste cuenta de mi presencia, pinté la mejor de mis sonrisas, puse la cabeza bien alta, subí a tope la música del Ipod  y pase por delante tuya, tarareando la canción que tanto me gustaba y que ahora salía por las auriculares entrando directamente por mis oídos. Y tu mientras me seguías con la mirada. Notaba tu mirada primero en mi nuca y luego en mi espalda. Y cuando doblé la esquina comprobé que tu mirada estaba puesta donde mi espalda deja de llamarse espalda. Pero me daba igual, seguí caminando hasta llegar a mi destino y notar que la gente me miraba y entonces me dí cuenta de que seguía cantando y había subido bastante el volumen. Pero me daba igual, igual que tu, ya no me importa lo que hagas, lo que digas o lo que mires. Ya no me importas tú. Porque hoy soy más fuerte.